El radiador es un elemento clave para el buen funcionamiento de un motor. Talleres Safety Car recuerda a los conductores en un artículo en su web que es el encargado de disipar el calor del líquido de refrigeración que viene del motor para regular, de este modo, su temperatura.

Para realizar esta labor imprescindible, señalan desde la enseña, el radiador cuenta con un depósito de entrada y otro de salida entre los que hay conectadas numerosas canalizaciones, o haces, revestidas de aletas que favorecen el intercambio térmico entre el líquido refrigerante y el aire ambiental. Si estas «haces» no realizan bien su trabajo, la temperatura de líquido al entrar en el motor será demasiado elevada pudiendo causar graves averías en la mecánica.

En Talleres Safety Car recordamos a los automovilistas que hay señales que permiten detectar averías en el radiador. Las dos más importantes son la diferencia de temperatura entre una parte y otra de este elemento y, la fundamental, el sobrecalentamiento del motor.